El Salmos 119, tiene mucho que enseñarnos, su amor por la
ley del Señor se hace notar en cada uno de sus versos. Estudiemos algunas de
sus características y curiosidades más resaltantes, investigadas en diversas
fuentes:
SALMOS 119. CURIOSIDADES
Colección de poemas religiosos, de los que una
gran cantidad se cantaba en el templo. Los israelitas los llamaban “Himnos de
Alabanza”. La expresión libro de los salmos (cfr.Lc. 20:42) proviene de la
traducción griega. Hay setenta y tres salmos cuyos título en heb. Los atribuyen
formalmente a David. De ahí proviene la designación general de “Salmos de
David” (cfr. He. 4:7)
AUTORES
No se ha determinado quien sea el autor de muchos
de los salmos; es probable en algunos casos que el nombre atribuido a ciertos
salmos se pueda referir al recopilar más bien que al autor.
La siguiente es una lista sugerida de autores
tomada de varias versiones de las Escrituras.
Atribuidos a David 73, a los hijos de Core 11, a
Asaf 12, a Eman 1, a Etan 1, a Salomón 2, a Moisés 1, a Hageo 1, a Zacarías 1,
a Ezequías, no hay certeza en cuanto al número
, a Esdras 1, y el resto es anónimo.
1.
SI, ES REALMENTE LARGO.
Es el salmo
más largo, compuesto de 22 estrofas, 176 versos, y también el capítulo más
largo de la biblia.
2. ES UN ACROSTICO HEBREO.
En la primera estrofa del salmo, la primera
palabra de cada uno de los ocho versículos comienza con la letra hebrea Alef,
la primera letra del alfabeto. En la segunda estrofa, las primeras palabras del
alfabeto, Beth. Así va, con una estrofa para cada letra del alfabeto. Su
inherente énfasis en el orden y en el diseño ha sido interpretado como un
símbolo de como Dios y su ley promueven el orden, y no el caos. Se podría decir
que el salmos 119 es un A-Z hebreo, en forma poética.
3. TIENE UNA LEYENDA ADJUNTA.
Hay una antigua tradición que dice que el
acróstico, alfabético patrón del salmo fue utilizado por el rey David, que lo
utilizo para enseñar a su hijo, Salomón,
el alfabeto hebreo. Al saber esto, Salomón, no solo aprendería las
letras, sino que podría aprender el “alfabeto” de la vida espiritual y ética.
No es algo de lo que la Biblia nos dice nada, y no sabemos quién escribió el
salmo, pero es una buena idea. Si quieres practicar el alfabeto griego ahora
sabes que hacer.
4. SU TODO SOBRE LA LEY.
“Bienaventurados los perfectos de camino, los que
andan en la ley de Jehová”, se lee en el primer versículo del salmo. Esta
beatitud establece el tema del resto del salmo: la Ley (en hebreo: Torah, con
varios otros sinónimos para “ley” usado en todo el salmo). El salmista no solo
habla de hacer la ley, sino que habla de amar la ley: “Me he gozado en el
camino de tus testimonios más que de toda riqueza. En tus mandamientos
meditare; considerare tus caminos. Me regocijare en tus estatutos; no me
olvidare de tus palabras”. (Versículos 14-16)”
5. Y LA LEY ES ALGO BUENO
Sin la Ley/Tora, la Biblia
tendría bastantes agujeros en ella. Este salmo nos enseña que lo que Dios
ordena es bueno y nos recuerda que ser cristiano no es solo creer en ideas
abstractas de la “gracia”, sino convertirse en personas santas, buenas,
santificadas por Dios, que aman como Jesús lo hace, la ley se ocupa de la
justicia, de cómo vivimos y, en última instancia, refleja el carácter de Dios.
Los cristianos no deben encontrar su identidad en la ley, pero deben amarla; el
salmista lo hizo.
6. ES POESIA HECHA A MANO, NO
ALABANZA ESPONTANEA.
CS Lewis escribió que “no es, y no pretende ser,
un repentino derramamiento del corazón… Es un patrón, una cosa hecha como
bordado, puntada a puntada, a través de largas y tranquilas horas, para El amor
del sujeto y el deleite de la artesanía tranquila y disciplinada”
7. ES UNA ORACIÓN POST-PASCUA.
Un erudito Bíblico, Michael Goulder, teorizo que el
salmo 119 al final de una liturgia pascual: se leería al final de la
celebración del festival de Pascua. La Pascua celebra la liberación de la
esclavitud de Egipto, mientras que la siguiente fiesta, la fiesta de las
Semanas Pentecostés, es tradicionalmente una celebración de la llegada de
Israel al Sinaí y su recepción de la ley. El salmo 119 espera entonces la ley
que ha de venir, y así dice: “Me deleitare en tus mandamientos y meditare en
sus decretos” (versículos 47-48). El pueblo judío vivió su propia historia en
su oración y alabanza.
Gracias!!! Dios bendiga muchooo!!!
ResponderEliminarRecién encontré la pagina
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